Qué Hacer Si Tu Vecino Es Un Problema
Introducción
La convivencia vecinal es uno de los pilares de la vida en comunidad. Aunque en una urbanización o en un complejo de viviendas unifamiliares vivan personas con gustos, necesidades y formas de vida muy distintas, lo ideal es que exista un buen clima de convivencia y que los vecinos se respeten y colaboren entre sí.
Pero en ocasiones, el buen ambiente que debería existir entre los vecinos se ve empañado por la mala conducta de uno o varios de ellos. En estos casos, resulta imprescindible saber cómo actuar y a qué organismos acudir para intentar solucionar el problema.
¿Qué Hacer Si Tu Vecino Es Un Problema?
Identifica el problema
La primera medida que debes tomar si consideras que tu vecino es un problema, es tener claro qué es lo que te molesta de su conducta. Identificar el problema te ayudará a saber cómo abordarlo y a buscar la solución más adecuada.
Algunos de los problemas más habituales que pueden surgir entre vecinos son el ruido, los malos olores, los daños en la propiedad, la falta de limpieza o el incumplimiento de las normas de convivencia.
Habla con él
Una vez que hayas identificado el problema, lo más adecuado es hablar directamente con el vecino para que tome las medidas necesarias para solucionarlo. En la mayoría de los casos, esto será suficiente para que el vecino cambie su conducta.
Si no te sientes cómodo hablando en persona con tu vecino, puedes enviarle una carta o un correo electrónico en el que le expliques el problema y le pidas que lo solucione.
Acude a tu comunidad de vecinos o a tu propietario
Si hablar directamente con tu vecino no ha funcionado o si el problema es muy grave, puedes acudir a tu comunidad de vecinos o a tu propietario para que tomen las medidas necesarias.
En el caso de que vivas en una vivienda de alquiler, podrás ponerte en contacto con tu propietario o con la gestora de la vivienda para que tomen cartas en el asunto.
Ponte en contacto con la Policía
Si el problema que estás teniendo con tu vecino es de índole penal, como una agresión, un hurto o un daño a tu propiedad, lo más adecuado es ponerse en contacto con la Policía para que intervengan.
Acude a un mediador
Si has hablado con tu vecino y no has conseguido que cambie su conducta, o si el problema es muy grave, una solución puede ser acudir a un mediador. Un mediador es una persona imparcial que ayudará a las dos partes a llegar a un acuerdo.
Acude a un arbitro
Si las negociaciones con el mediador no han dado resultado, o si el problema es muy grave, una solución puede ser acudir a un arbitro. Un arbitro es una persona imparcial que emitirá una decisión que será vinculante para las dos partes.
Conclusiones
La convivencia vecinal es uno de los pilares de la vida en comunidad. Aunque en una urbanización o en un complejo de viviendas unifamiliares vivan personas con gustos, necesidades y formas de vida muy distintas, lo ideal es que exista un buen clima de convivencia y que los vecinos se respeten y colaboren entre sí.
Pero en ocasiones, el buen ambiente que debería existir entre los vecinos se ve empañado por la mala conducta de uno o varios de ellos. En estos casos, resulta imprescindible saber cómo actuar y a qué organismos acudir para intentar solucionar el problema.