En España, actualmente, para adquirir una vivienda se hace necesario contar con una cantidad de dinero considerable. Y es que el precio medio de una casa en nuestro país asciende a los 133.000 euros, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por ello, cada vez son más las personas que recurren a los préstamos para comprar una casa. Se trata de una solución económica factible para muchas familias, teniendo en cuenta que el dinero del préstamo hipotecario se devuelve en cuotas mensuales durante un periodo de entre 15 y 30 años.
A la hora de solicitar un préstamo hipotecario, es importante tener en cuenta una serie de aspectos, como el importe que necesitamos, el interés del préstamo, el plazo de devolución del mismo o el tipo de préstamo que más se adapte a nuestras necesidades.
¿Cómo se solicita un préstamo hipotecario?
Solicitar un préstamo hipotecario es, hoy en día, un proceso relativamente sencillo. La primera opción que se nos presenta es acudir a nuestra entidad bancaria y solicitar el préstamo allí mismo.
En ocasiones, este no es el mejor camino a seguir, ya que las condiciones que ofrecen las entidades bancarias no siempre son las más favorables. Por ello, lo más recomendable es hacer uso de las llamadas “hipotecas online”.
Las “hipotecas online” son un tipo de préstamo hipotecario que ofrecen algunas entidades financieras a través de Internet. Las condiciones de estas hipotecas son, en general, más favorables que las de las hipotecas bancarias tradicionales.
Algunas de las ventajas de las “hipotecas online” son las siguientes:
Interés más bajo: uno de los principales atractivos de las “hipotecas online” es el interés que ofrecen. En general, suelen ser menores que los de las hipotecas bancarias tradicionales.
Flexibilidad: otra de las ventajas de las “hipotecas online” es la flexibilidad que ofrecen. En algunos casos, es posible modificar algunos de los parámetros del préstamo, como el plazo de devolución o el importe de las cuotas mensuales.
Cuidado con las comisiones: aunque las “hipotecas online” suelen ser más favorables que las bancarias, es importante fijarse en las comisiones que cobran algunas entidades. En algunos casos, estas comisiones pueden neutralizar las ventajas que ofrecen estos préstamos.
¿Qué documentación se necesita para solicitar un préstamo hipotecario?
Solicitar un préstamo hipotecario supone reunir una serie de documentos. La documentación necesaria para obtener un préstamo hipotecario suele ser la siguiente:
Documento de identidad: es necesario presentar un documento de identidad, ya sea el DNI, el pasaporte o el NIE.
Certificado de empadronamiento: también se suele exigir un certificado de empadronamiento, que podremos solicitar en el Ayuntamiento de nuestra localidad.
Nómina o declaración de la renta: en algunos casos, se exige que el solicitante de un préstamo hipotecario presente una nómina o una declaración de la renta. Esto es especialmente importante si nuestro trabajo no está fijado en un contrato.
Para determinar si somos o no aptos para solicitar un préstamo hipotecario, las entidades financieras suelen realizar un “estudio de solvencia”. Se trata de un análisis en el que, entre otros factores, se tienen en cuenta nuestros ingresos mensuales, nuestros gastos y nuestros ingresos futuros.
¿Cuál es el interés de un préstamo hipotecario?
El interés de un préstamo hipotecario es la cantidad de dinero que el prestamista cobra al prestatario por el préstamo concedido. En España, el interés de los préstamos hipotecarios se mide en “tanto por ciento anual” (TIN).
El TIN es el interés que se cobra por un préstamo hipotecario en el transcurso de un año. Aunque el TIN es un buen indicador del coste de un préstamo, no es el único. Para calcular el coste real de un préstamo hipotecario, es necesario tener en cuenta otros factores, como las comisiones o los gastos de formalización.
¿Cuáles son los tipos de préstamo hipotecario más comunes?
En España, actualmente, existen dos tipos de préstamo hipotecario más comunes: los préstamos a tipo fijo y los préstamos a tipo variable. Cada uno de ellos tiene sus propias características y ventajas.
Los préstamos a tipo fijo son aquellos en los que el TIN se mantiene constante durante toda la vida del préstamo. Esto quiere decir que, una vez que se ha formalizado el préstamo, el prestatario sabe de antemano cuánto tendrá que pagar cada mes.
Los préstamos a tipo variable, por su parte, son aquellos en los que el TIN varía en función de un índice. El índice más utilizado en España es el Euribor. Esto quiere decir que, si el Euribor aumenta, el TIN también lo hará.
¿Cómo se calcula el importe de las cuotas mensuales de un préstamo hipotecario?
Para calcular el importe de las cuotas mensuales de un préstamo hipotecario, se utiliza la fórmula de anualidad constante. En esta fórmula, el importe de las cuotas mensuales se determina en función de tres factores: el importe del préstamo, el TIN y el plazo de devolución del préstamo.
Si no se dispone de los datos necesarios para calcular el importe de las cuot